miércoles, 10 de junio de 2009

DE SANDALIAS DORADAS...


Hace aproximadamente un año me compré unas sandalias monísimas en Bershka, doradas, de estas de dedo pero cogidas por detrás también. Me encantaron, eran de suela super plana, algo que últimamente cuesta encontrar porque o son bastísimas o llevan esa mini cuña que para mi gusto es horrible. Además tenían un tono dorado no cantoso, nada que ver con ese color oro que lucen habitualmente las chanclas de miles de guiris, que favorecía un montón con el moreno playero. En fin, que eran PERFECTAS!!!

Pues bien, apenas puestas un par de veces...sucedió la tragedia!

Una madrugada del verano pasado tuvimos que llevar a mis cuñados y sobris al aeropuerto de Alicante que viajaban a Bruselas de vacaciones.

Un pollo asado, dormir 2 horas, un Honda Jazz, un asiento trasero y una autopista tuvieron la culpa.

A mitad de camino y en una cuneta oscura entre la provincia de Murcia y Alicante tuve que salir precipitadamente del coche a dar rienda suelta a mi estómago y liberar ese pollo. Salí a trompicones porque estaba que me vomitaba encima (obviemos la parte en que le salpico, de refilón eso sí, la pierna a Alfredo) con tan mala suerte que al volver al coche me doy cuenta que se me han roto LAS 2!!! chanclas, además por una parte que es inarreglable. Mierdaaaaaa!!!

(He de decir que me acordé de la familia de Amancio y que maldije a Inditex, de lo cual ahora me arrepiento jeje)

Sobra decir que a nuestra llegada al aeropuerto tuve que caminar por la terminal descalza, acumulando todo tipo de porquería en los pies, aunque como somos amigos de la guasa y tengo un novio con un gran espíritu solidario, decidimos que compartiríamos sus chanclas; un pie descalzo cada uno, una chancla para él y una barca del 43 para mi.

Esta es la trágica historia de como, con todo el dolor de mi corazón, tuve que tirar mis sandalias planitas preferidas y los que me conozcan sabrán que tirar zapatos es para mi todo un trauma.

Aún no acabado el verano, intenté buscar otras parecidas pero mi gozo en un pozo pues ya habían empezado las temidas rebajas, esa época terrorífica en la que nadie me encontrará en una tienda y de la que algún día hablaré, y por supuesto no había nada excepto basura.

Pues bien, ha tenido que pasar un largo año para que de casualidad y buscando unas cuñas de esparto (misión imposible, por cierto), haya encontrado casi las mismas sandalias añoradas, en Oysho, casi tan fabulosas como las genuinas. Prometo cuidarlas más esta temporada!!!

5 comentarios:

Loufits dijo...

muy muy bienvenida!!
yo aun ando un poco perdida pero si te puedo ayudar en algo ya sabes donde estoy.
1besito guapa y te sigo yo a ti tb
x cierto, me alegro de que hayas encontrado unas sandalias similares
:)

A.M.G. dijo...

Hola wapa!

veo que eres nueva oir este universo bloguero!! espero que subas muchas fotos y que disfrutes haciendolo como yo!!

un besote!

syl dijo...

Espero tengas más suerte con las nuevas, y bienvenida!
besos

Sara dijo...

Muchísimas gracias a todas, por vuestro apoyo y por tan calurosa bienvenida a este mundillo!!!! Besitos

cacao dijo...

Yo a Syl la sigo desde hace tiempo!

Este mundo blogeril es un pañuelo.